Aproximadamente una decena de niñas y niños de El
Asiento, acompañados por sus padres y madres, se reunieron en una conmovedora
jornada con miembros de la Corporación CIEM Aconcagua en la escuela José
Bernardo Suárez para dar por finalizados los talleres de educación ambiental.
Miércoles 7 de
Enero, desde las 7 de la tarde y cuando el calor ya empezaba a ceder ofreciendo
una tregua ante las temperaturas veraniegas, se reunieron parte de los estudiantes
junto a sus padres e integrantes del equipo CIEM Aconcagua. Estaban todos en el
patio de la escuela José Bernardo Suárez de El Asiento, celebrando el cierre de
los talleres de Tierra de Niñas y Niños, TINI como lo llaman cariñosamente.
De manera
quincenal, se realizaron sesiones durante todo el año, reuniendo a estudiantes
desde 5º a 7º año básico para abordar temas como ecología, cambio climático y
–por supuesto- conservación ambiental del patrimonio local, todo esto con el
objetivo de que las niñas, niños y jóvenes se empoderen como ciudadanos activos
y comprometidos con el medioambiente. Es bueno recordar que El Asiento cuenta
con su propio Santuario de la Naturaleza, la Serranía del Ciprés, cuya
declaración se remonta al año 2006 y hoy se erige como uno de los orgullos de
la localidad y de todo el valle de Aconcagua.
Fiel al
propósito de promover las capacidades colectivas de las niñas y niños, fueron las
encargadas de los talleres, Alejandra González y Patricia Anwandter, quiénes
animaron a la directiva de estudiantes para relatar los pormenores del taller
que culminaba. De este modo se inauguró un espacio dentro de la misma escuela,
remozado con árboles, plantas, juegos y espacios de esparcimiento, el que fue bautizado
como “Lugar de Niñas y Niños” y cuyo objetivo será darle continuidad a los
temas trabajados a lo largo del año.
En este sentido,
la directiva de las y los niños firmó un acuerdo con la directora para asegurar
la continuidad del espacio, de modo que los estudiantes sigan siendo sus
principales gestores, y para ratificar el compromiso de la escuela respecto de
la construcción de basureros y puntos de reciclaje, composteras, un vivero y
señalética apropiada. Se trata por tanto de una oportunidad para fortalecer la
educación ambiental en la escuela a través de métodos didácticos alternativos.
Luego de dicha
presentación, fueron los responsables de CIEM Aconcagua quiénes agradecieron la
instancia y celebraron el espacio de encuentro con estudiantes y apoderados,
especialmente a las madres voluntarias que demostraron su apoyo hacia la
iniciativa. Jorge Ahumada, director de la Corporación y encargado de entregar
los diplomas a todos los participantes, señalaría que “resulta fundamental el
trabajo con los distintos miembros de la comunidad educativa, puesto que así se
fortalecen desde la base los vínculos dentro de la localidad y se potencia la
capacidad de los estudiantes para organizarse”. Además los asistentes se
retiraron con maceteros de plantas y bolsas institucionales del proyecto,
elaboradas con género para desincentivar el uso de bolsas plásticas.
Durante una hora
y media se extendió una ceremonia que se caracterizó por el compromiso de los escolares
y sus apoderados con el Lugar de Niñas y Niños, dando cuenta de la importancia
de contar con un espacio para poder desarrollar actividades de organización
estudiantil y de educación ambiental. Al final de la jornada se hizo sentir el
interés de todos por acercarse más a El Asiento y su patrimonio.